Si bien reconozco que soy más partidario de las sevillanas movidas, he de reconocer que, cantándole sevillanas lentas al amor, no habrá en mucho tiempo nadie como Rafael del Estad. Rafael se nos ha ido dejando un hueco que difícilmente pueda llenarse a día de hoy. Aunque hace tiempo que abandonó los escenarios, nunca hemos dejado de disfrutar de su arte porque hemos sido muchos los que hemos querido conquistar corazones cantando sus sevillanas . Se va Rafael para dormirse, como el cantó, en la orilla del arte, como el río guadalquivir, besando Triana y Sevilla. Descanse en paz Maestro